La pérdida de carga (pérdida de presión) corresponde a la reducción de presión que experimenta el fluido que se desplaza en una cañería por:
- Roce entre las moléculas del fluido.
- Roce contra las paredes de la cañería.
- Roce por cambios de dirección o de diámetros de la cañería.
- La gravedad.
En la medida que el fluido avanza en una instalación domiciliaria de agua potable se genera una progresiva pérdida de carga en éste.
Por eso es importante que al proyectar una instalación de agua dicha pérdida sea la más baja posible.
Siempre tener presente que el agua con la que trabajamos en instalaciones sanitarias tiene “movimiento dinámico”.